Resumen Viernes Santo Granada 2012

El Viernes Santo fue también un día fastidiado por la lluvia. A las 16:15 estaba previsto que saliera la hermandad de los Ferroviarios a la calle. El cielo a esa hora estaba con claros y nubes, pero aún así la hermandad de los Ferroviarios decidió aplazar su hora de salida una hora, así como retrasar en una hora su paso por Carrera Oficial. Así, de mutuo acuerdo, todas las hermandades del Viernes Santo decidieron retrasar su salida una hora, así como su paso por Carrera Oficial. De esta manera los Ferroviarios en lugar de salir a las 16:15 salió a las 17:15. Sin embargo, a las 17:15 el cielo estaba mucho peor que a las 16:15, y justo cuando salía el paso de palio de la Virgen del Amor y del Trabajo, comenzó a llover. Así fue como la hermandad de los Ferroviarios, se tuvo que volver a su templo, poco después de haber iniciado su recorrido penitencial por la Avenida de la Constitución.

En cuanto a las restantes hermandades, tuvieron más suerte, pues la lluvia cesó sobre las 18:30. Así fue como los Favores, Los Escolapios, El Santo Entierro y las Chías pudieron salir a la calle. Pasaron todas las hermandades del Viernes Santo por tribuna, excepto una, la hermandad de los Ferroviarios, que tuvo que volver a su iglesia por la dichosa lluvia. Parecía que salvo por la hermandad de los Ferroviarios, el Viernes Santo se iba a desarrollar con normalidad, pero no fue así. Justo cuando el paso del Santo Sepulcro salía por la puerta de la catedral, comenzó a chispear, de manera que se ocasionó un pequeño parón en la hermandad, pero al final decidieron ir a paso rápido hasta la iglesia de San Gil y Santa Ana. Detrás del Santo Entierro, entró en catedral la hermandad de las Chías. Realizó su estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral, y sin mucha demora salió por la Puerta del Perdón, para dirigirse a su templo del monasterio de San Jerónimo. ¡Qué triste fue ver un viernes santo más truncado por la lluvia!

La hermandad de Los Favores y la de los Escolapios también regresaron rápidamente a sus sedes, eran las 23:30 cuando volvió a llover sobre la ciudad de Granada, una lluvia fina, pero que mojaba bastante. Así fue como desgraciadamente se fastidió el Viernes Santo, un Viernes Santo que salvo por la hermandad ferroviaria, se estaba desarrollando con total normalidad hasta ese dichoso momento en que apareció la lluvia.

Aquí os dejo unas imágenes de la salida y regreso de la hermandad de los Ferroviarios y del regreso de la hermandad de las Chías. Con la colaboración de David Sánchez.