UN DIGNO HOMENAJE A LA PATRONA
GRAN PEREGRINACIÓN MARIANA «MARÍA, REINA DE GRANADA»
El denominado «Año de la Fe» que proclamó el Papa Benedicto XVI el 11 de Octubre de 2012 y concluyó en noviembre de 2013 ha sido muy importante para todos los que pertenecemos a la comunidad cristiana católica, y durante el cual se han celebrado diversos actos religiosos para su conmemoración. Por este motivo, a lo largo del año 2013, las cofradías de semana santa han realizado en España procesiones magnas, como los Vía Crucis de la Fe y las Magnas Marianas en distintas ciudades y localidades de nuestro país. En nuestra Comunidad Autónoma podemos destacar por ejemplo el Vía Crucis de la Fe que se celebró en Sevilla en febrero de 2013 (a pesar de que la lluvia impidiera que los pasos salieran hacia la catedral), el Vía Crucis Magno de Córdoba del 14 de Septiembre, la Magna Procesión de Jaén en junio, la Mater Dei de Málaga, etc.
La Magna Mariana de Granada que se celebró el 18 de Mayo de 2013 fue una efeméride digna para el recuerdo de la semana santa granadina, que congregó a una numerosa muchedumbre proveniente de diferentes puntos de España e incluso de otros países. Acto que no solo adquirió su importancia por haber sido organizado durante el período del «Año de la Fe», sino más que nada porque se conmemoraba el centenario de la coronación canónica de nuestra Patrona. Y también cabe decir que dicho evento engrandece nuestra semana santa y hace gala de su Interés Turístico Internacional.
La última vez que se hizo una procesión magna en Granada fue en 2009 con la Passio Granatensis, en la cual participaron 22 pasos, a pesar de que El Silencio no saliera a las calles debido a la inoportuna aparición de la lluvia que acostumbra a estar presente en estos últimos años. Sin embargo, en lo que respecta a magnas marianas, el antecedente a la Magna Mariana del 18 de Mayo de 2013 lo encontramos en la «Magna Procesión de Patronas», que se realizó el 7 de noviembre de 1954 con motivo de la conmemoración del «Año Santo Mariano de 1954», y que declaró el Papa Pío XII por el centenario de la proclamación dogmática de la Pura y Limpia Concepción de María. Como anécdota, cabe resaltar que aquel acto se pensaba realizar el 17 de octubre, se cambió la fecha de su celebración y curiosamente también había estado lloviendo horas antes del comienzo del evento y se dudaba de que se pudiera realizar la gran procesión. Fue el evento más parecido a la Magna Mariana del 2013, en el cual también participaron numerosas imágenes marianas de la provincia granadina.
En esta última ocasión, siendo 18 de Mayo de 2013, se le rindió homenaje a nuestra Patrona, la Virgen de las Angustias, de la manera más digna posible, en conmemoración del centenario de su coronación canónica. ¡Cómo y de qué manera disfrutamos los cofrades de ese bello encuentro que se produjo en la Carrera de la Virgen entre las 33 vírgenes participantes en la gran procesión mariana y nuestra Patrona! Todo comenzó antes de que se iniciaran las luces del alba, cuando salía la primera virgen desde la Abadía del Sacromonte en torno a las seis de la madrugada. Así empezaban los traslados de las imágenes desde su sede a la catedral. Una hora más tarde comenzaba a amanecer sobre la Alhambra y el Albaicín y ya se apreciaba un cielo gris que auguraba que una vez más la lluvia haría acto de presencia. ¡Y vaya si lo hizo! Nada más salir el cortejo que acompañaba a María Santísima de la Aurora Coronada cayeron algunas gotas de lluvia. A pesar de eso, fue una estampa maravillosa el ver bajar a las vírgenes del barrio del Albaicín bañadas bajo la luz de unos tímidos rayos de sol que querían, por así decirlo, disipar los nubarrones que pintaban el cielo. Conforme pasaban las horas iban llegando los pasos de las distintas Vírgenes a la Catedral y el cielo se fue abriendo. De esta forma pudimos vivir momentos únicos, al contemplar la entrada de las numerosas imágenes marianas de nuestra ciudad, tanto por la Puerta del Perdón como por la Puerta de la Encarnación. Así culminaban los traslados sin música de las dolorosas de nuestra Semana Santa procedentes de los diversos barrios de nuestra ciudad. Poco más tarde se abrieron las puertas de la catedral para que toda aquella persona que quisiera pudiera contemplar los 33 pasos participantes en el interior de las naves catedralicias: las de nuestra ciudad y las patronas de las localidades granadinas de Almuñécar, Alhama de Granada, Loja, Ugíjar y Motril.
Y ya por la tarde estaba previsto que a las cinco se abriera la Puerta de la Encarnación y diera comienzo la Gran Peregrinación Mariana, «María, Reina de Granada». Nuevamente la incertidumbre nos acongojó, puesto que en torno a las 17:00 llovía sobre nuestra ciudad, lo que obligó a retrasar la salida de la procesión hasta las 17:30, cuando por fin se abrieron las puertas ante los aplausos de numerosas personas que esperaban expectantes. Con solo media hora de retraso, la cruz de guía de la hermandad de Santa María de la Alhambra se ponía en la plaza de las Pasiegas, bajo la luz de un sol radiante que asomaba entre las nubes. A pesar de la fría e inestable tarde, se pudo desarrollar el acto sin problemas, aunque la lluvia deslució algo el desfile de las 33 imágenes. Todos los pasos pudieron hacer su estación de penitencia ante la imagen de Nuestra Patrona sin inconvenientes. Conforme iban llegando las vírgenes a la plaza del Humilladero se fueron incorporando las bandas de música y agrupaciones musicales.
Durante la noche sí pudimos disfrutar de los regresos de las distintas vírgenes a sus respectivos barrios y de los sones de las bandas de música y agrupaciones musicales que las acompañaron en aquel tramo de la jornada. La única virgen que no pudo finalizar su recorrido fue María Santísima del Sacromonte, que se refugió en catedral ante la inminente amenaza de lluvia y el largo recorrido de regreso hasta el Sacromonte. Nada más entrar en su templo el paso de Santa María de la Alhambra bajo los sones del Himno Real que tocaba la Agrupación Musical de Nuestro Padre Jesús Despojado de Jaén, apareció de nuevo la lluvia.
En definitiva, fue una jornada que disfrutamos mucho los cofrades a pesar de la lluvia y que recordaremos con alegría el resto de nuestras vidas. Un día histórico para la Semana Santa de Granada y que no volverá a repetirse en muchos años. Fue la manera más digna de rendirle homenaje a nuestra queridísima Patrona.
Miguel Ángel Gómez Pérez
